1.- ROL DEL REGISTRADOR Y RELACION CON LAS AUTORIDADES NACIONALES.
El Régimen Jurídico del Automotor crea un sistema de registración sustentado en dos organismos: el Registro Nacional de la Propiedad Automotor constituido por la suma de sus divisiones territoriales que son los Registros Seccionales y la autoridad de aplicación, la Dirección Nacional de los Registros Nacionales del Automotor y de Créditos Prendarios (cfr. Dto N° 335/88), con roles y facultades distintas y a su vez complementarias.
En tal sentido, la autoridad de aplicación determina jurisdicciones, propone la designación de los Encargados, dicta las normas técnico registrales y detenta la potestad disciplinaria, pero no tiene facultades registrales. La potestad de la calificación y registración ha sido asignada originariamente al Encargado de Registro por el legislador, no constituye una delegación del poder administrador y esto fija el límite al accionar de la autoridad de aplicación respecto del registrador.
Tratándose de dos organismos con competencias y responsabilidades propias y complementarias, el trabajo mancomunado y respetuoso de esas competencias y responsabilidades es el camino más adecuado para el correcto desarrollo de la actividad encomendada por el legislador.
La AAERPA, como institución altamente representativa de los registradores se erige como el interlocutor necesario en este trabajo coligado, brindándole al Estado una voz única en nombre de sus asociados.
Destacamos con beneplácito que tanto la DNRPAyCP como los registradores compartimos una única visión de la actividad y de los desafíos del momento: un registro moderno, que brinda seguridad jurídica en un entorno tecnológico y respetuoso de los derechos de los usuarios es el objetivo planteado por los registradores en todos los congresos y reuniones de la AAERPA acaecidas en los últimos diez años. Celebramos que hoy sea éste también el objetivo de la DN.
A ese efecto, entendemos imprescindible:
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Fijar claramente las metas y establecer mecanismos de trabajo conjunto para definir los procesos para su implementación.
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Las nuevas herramientas tecnológicas deben ser previsibles y flexibles a las distintas realidades del país, especialmente en lo relativo al desarrollo de las comunicaciones y el acceso limitado o inexistente a la tecnología en sectores rurales o del interior de nuestro territorio.
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Las innovaciones deben contar con un período de prueba necesario previo a su implementación en todo el país.
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Contemplar la incorporación de herramientas que también faciliten la gestión y control interno del Seccional (lectores de códigos para la carga de solicitudes tipo, carga única en todos los sistemas registrales e impositivos) y de los usuarios (calculador de aranceles para los pagos por depósito o transferencia bancaria).
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Implementar acciones tendientes a la modernización de los sistemas de gestión de los organismos locales de tributación. Las evidentes ventajas que la precarga de una transferencia por 08D brinda al presentante, se desvirtúan al momento de completar por triplicado y con carbónico varios formularios 13 en el mostrador del Registro.
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Las normas y novedades debieran ser comunicadas a los Encargados con anticipación a los medios de prensa, a fin de contar con la información pertinente para satisfacer las consultas que se generan.
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Constituir un espacio de trabajo conjunto para la elaboración de los actos necesarias para adecuar las normas técnico registrales a las innovaciones introducidas por las modificaciones de la legislación de fondo y para evitar resabios arcaicos que burocratizan la actividad.
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Regularizar la titularidad de los registros, entendiendo que la estabilidad es la contrapartida imprescindible para la realización de las inversiones necesarias para la correcta prestación del servicio. La contratación y capacitación del personal, el mantenimiento de los locales, la actualización del equipamiento son imprescindibles, pero su alto costo debe amortizarse a lo largo del tiempo, motivo por el cual el legislador ha otorgado a este sistema público de gestión privada la estabilidad en la función. Es muy difícil programar las cuantiosas inversiones necesarias con un nombramiento precario que puede ser revertido por la sola voluntad de la Administración.
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Prever un mecanismo de excepción para el supuesto de fallecimiento del Encargado que permitan garantizar la prestación del servicio y salvaguardar los derechos y responsabilidades de todos los involucrados: Estado Nacional, usuarios y herederos.
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La revisión y ajuste periódico de los emolumentos a fin de mantener la ecuación económico- financiera, otorgando previsibilidad a la gestión, lo que permite programar las inversiones necesarias para mantener la excelencia.
2.- ROL DE LA AAERPA
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Respecto DNRPA
La AAERPA ha logrado posicionarse como el portavoz de los Encargados de Registros ante las autoridades nacionales. En los últimos años -en mayor o menor medida, dependiendo de la temática y el perfil de los funcionarios actuantes- se ha logrado participar en la elaboración o implementación de las medidas adoptadas.
Advertimos que el aporte de la AAERPA es preponderante en el éxito de la implementación de las decisiones tomadas por las autoridades competentes. Por el contrario, en aquellos casos en los que solo se nos notifica, lamentablemente encontramos inconsistencias o dificultades en la ejecución. En modo alguno se trata de cuestionar el proceso decisorio como resorte exclusivo de la autoridad gubernamental, hablamos de aportar nuestra experiencia y el conocimiento de nuestra labor, en nuestra zona y con nuestro perfil de usuario en la reglamentación del circuito administrativo.
Debemos reconocer que detectado un error o un problema en la reglamentación, las autoridades han procedido habitualmente a escucharnos y corregir el error, pero no puede obviarse que esto puede acarrear problemas, afectar derechos y hasta generar daños que luego dan origen a una judicialización de la actividad que entendemos no es beneficiosa.
Asimismo, hay cuestiones respecto de las cuales no se han logrado acuerdo con las actuales autoridades, pese a lo cual entendemos que son prioritarias para el buen mantenimiento del sistema, por lo que encomendamos a los actuales representantes de la Asociación para que reiteren su tratamiento. Ellas son:
1.- Incorporación de una figura entre las autoridades del Seccional, que en las condiciones que determine la DN pueda continuar a cargo el tiempo necesario para cerrar debidamente las cuestiones pendientes en caso de fallecimiento o renuncia del Titular, garantizando los derechos de los herederos, el Estado, los organismos tributarios y los usuarios.
2.- Conformación de equipos conjuntos de trabajo para la actualización de la normativa técnico registral, la elaboración de convenios marco para la percepción de impuestos locales e infracciones, y el desarrollo de herramientas informáticas.
3.- Designación como Encargados Titulares de los colegas que fueron propuestos oportunamente, habiendo cumplido obviamente todos los requisitos para ello, en el marco de las Resoluciones ministeriales 238/2002 y 12/1997 y actualmente han superado el límite de edad, exclusivamente por la mora de la Administración.
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RESPECTO DE LOS COLEGAS
Nadie duda hoy que los registros son altamente eficaces al momento de garantizar la seguridad jurídica y los derechos patrimoniales de los peticionarios. Ese es nuestro principal activo y nuestro aporte sustancial a la comercialización de automotores. El crédito prendario es masivo en nuestro país porque los Registros garantizamos un alto grado de cumplimiento y recuperabilidad, permitiendo tasas accesibles.
El desafío que se nos presenta hoy es sumar estándares de atención al público dignos de esa eficacia jurídica.
A ese efecto proponemos:
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Organizar ámbitos para el intercambio de experiencias respecto de la gestión registral para diseñar los circuitos administrativos que mejor se ajusten a cada realidad.
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Capacitarnos y capacitar a nuestro personal en atención al público y respeto a los derechos del consumidor.
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Adecuar las sedes registrales no solo para ajustarse a la normativa vigente, sino también para generar un espacio agradable y con los elementos necesarios para brindar una atención esmerada y de calidad.
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Repasar los requisitos que exigimos para cada petición a la luz de la normativa vigente a fin de detectar resabios de normas derogadas que burocraticen nuestra gestión.
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Acercarnos individual e institucionalmente a aquellos colegas que no participan en forma regular para transmitirles estas preocupaciones, resaltando que la mala imagen de un solo registro repercute negativamente sobre todos nosotros.
